Con máscara no.


Camino por los senderos que palpitan en tus venas,
rozando tu pelo, imaginando tu sonrisa,
escondido tras mi lápida.

Por favor, acaricia mis sueños,
que no tengo miedo de que sueltes tu cabello en mi cuarto,
ya no necesito un juego, no más,
no tires el dado, que me mata.

Anhelo transitar por tus pensamientos,
ser dueño de tus lágrimas,
que te rías al volver a pensarlo,
no ser mas poseído por lo mismo,
regresar soñando la realidad,
no ser esclavo de la mentira,
del celo marchito, del ocaso de tu belleza.

Nunca te lo he contado,
pero acá el anonimato no es mio, es tuyo,
la desconocida eres tu.

No podemos ver.

Sincérate, no me engañes.

Cambiemos.

Que nunca podría amarte con máscara.